viernes, 12 de septiembre de 2008

Oscar Niemeyer

Oscar Niemeyer en el Museo Nacional De Bellas Artes y en Espacio Arte Abierto de la Fundación Itaú / La Poética de la Forma y La Invención del Tiempo

Expositor: Oscar Niemeyer
Lugar: Museo Nacional De Bellas Artes (Parque Forestal s/n, metro Bellas Artes) y en Espacio Arte Abierto de la Fundación Itaú (Apoquindo 3457, Metro El Golf. Las Condes)
Técnica: instalación
Fecha: 20 de junio al 17 de agosto 2008
Horario: martes a domingo de 10:00 a 18:50 hrs.(MNBA), lunes a viernes de 9:00 a 14:00 hrs. (Espacio Arte Abierto)
Entrada: $600 adultos, $300 est. Y 3° edad, domingos liberada
Visitas guiadas concertadas: 6384060 / area.educativa@mnba.cl , Fundación Itaú: fainzua@performanc3.cl

Con una muestra que recorre los hitos más importantes de su obra, llega a Chile la arquitectura del brasileño Oscar Niemeyer, uno de los arquitectos latinoamericanos vivos más importantes a nivel mundial.

Con croquis, maquetas y fotografías de sus proyectos más importantes tomadas por su nieto Kadu Niemeyer, la exposición se presenta en dos espacios simultáneamente: En el Museo Nacional de Bellas Artes, la muestra adquiere el título “La Poética de la Forma”, en la cual, la obra del arquitecto se presenta como una línea de tiempo dividida en cinco fases, y en Espacio Arte Abierto de la Fundación Itaú donde se denomina “La Invención del Tiempo”, en la cual se mostrará la integración entre la arquitectura y las artes plásticas a través de los edificios proyectados por el arquitecto en Brasilia.

En el marco de la exposición también se proyectará el documental “La Vida es un Soplo”, del cineasta brasileño Fernando Maciel, que muestra la vida y obra de Niemeyer, quien cumplió 100 años en diciembre del año pasado.

En la exposición que se exhibe en el Museo Nacional de Bellas Artes, se puede apreciar la trayectoria arquitectónica de Niemeyer en cinco fases fundamentales:

1. Pampulha: La cuna de la Arquitectura Moderna Brasileña – 1940 a 1943

2. Forma Libre y Organicidad – 1943 a 1953

3. Brasilia: Modernidad, Magia y Eternidad – 1953 a 1965

4. Viviendo los “Años de plomo” en el Exterior y a Camino de una Arquitectura Social – 1965 a 1989

5. El Museo Personal y los Museos del Hombre – 1989 hasta hoy

La muestra entrega importantes referencias que han marcado su obra, dando cuenta de sus proyectos más creativos en el formalismo libre y orgánico de su arquitectura, las propuestas para Brasilia y sus proyectos de fuerte compromiso político, social y cultural.

En el Espacio Arte Abierto de la Fundación Itaú, la exposición muestra los aspectos esencialmente plásticos que marcan su trayectoria profesional, ejemplificados a través de fotografías con los edificios que fueron proyectados por él para la capital de Brasil. El énfasis está puesto en la integración de la arquitectura y las artes plásticas, característica sobresaliente de la arquitectura brasileña y de Niemeyer especialmente. También componen la muestra dos proyecciones rotativas; una con imágenes documentales, con fotos de la infancia y juventud de Niemeyer y la otra, con imágenes de Brasilia, única ciudad en el mundo planificada por un solo arquitecto. Además de las fotografías y proyecciones, se exhiben dibujos de paisajes y desnudos femeninos integrados con la arquitectura.

A propósito de la muestra se exhibirá un documental sobre el autor, del Director www.avidaeumsopro.com.br

1999
Proyecta, entre otros, el nuevo Teatro en el Parque Ibirapuera en São Paulo;
el Sector Cultural de Brasília; el Centro Administrativo de Betim, Minas Gerais; el Monumento Conmemorativo a los 500 Años del Descubrimiento de Brasil en São Vicente, São Paulo.
Se realizan las siguientes exposiciones: en el Museo de Arte Contemporáneo de Niteroi - Escultura de Oscar Niemeyer; en el Riocentro, Rio de Janeiro - Oscar Niemeyer 90 Años, que sigue después para Buenos Aires, Argentina, y Brasília.
Inicia el proyecto del Centro Cultural Oscar Niemeyer – en Goiás – obra concluida en 2006.
2000
Proyecta el Módulo Educación Integrada – MEI, Guarderías infantiles populares incorporadas a los Centros Integrados de Educación Pública – CIEPs; el auditorio en Ravello, en Italia; y la sede de la Orden de los Abogados de Brasil, en Brasilia
En Río de Janeiro es lanzado el documental “Oscar Niemeyer, un arquitecto militante en su siglo”, del cineasta belga Marc-Henri Wajnberg.
2001
Oscar proyecta, entre otros:
el Centro de Memoria del DOI-CODI (organismo del período de la dictadura militar), São Paulo; el Museo del Cinema, en Niterói, Rio de Janeiro;
el Acqua City Palace Moscú (Rusia) la residencia en Oslo (Noruega)

Recibe:
La Medalla de la Orden de la Solidaridad del Consejo de Estado de la República de Cuba; La Medalla del Mérito Darcy Ribeiro del Consejo Estadual de Educación de Rio de Janeiro; El Premio UNESCO 2001, en la categoría Cultura; El título de Gran Oficial de la Orden del Mérito Docente y Cultural Gabriela Mistral, del Ministerio de Educación de Chile
El título de Arquitecto del Siglo XX, del Consejo Superior del Instituto de Arquitectos de Brasil.
2002
Se realiza la exposición Oscar Niemeyer 90 años, en la Galérie Nationale du Jeu de Paume en París, Francia.
2003
Proyecta el Pabellón de la Serpentine Gallery en Londres, Inglaterra, el Centro Administrativo de Minas Gerais, el Museo Internacional de las Aguas en Brasília, el Monumento a la Paz en Moscú, Rusia, y el Museo del Mar, en Fortaleza, Ceará, entre otros.
2005
Proyecta, entre otros:
El Parque Encuentro de las Aguas, en Manaus, Amazonas
El Complejo Administrativo de la Itaipu Binacional, en Foz del Iguazú
El Parque Acuático de Potsdam, en Alemania
2006
Proyecta el Monumento a Simon Bolívar, Caracas, Venezuela; el Centro Cultural Principado de Asturias en Oviedo, España; el Memorial Leonel Brizola en Rio de Janeiro; Camino de la Soberanía Nacional, Porto Alegre; y la Embajada de Brasil en La Habana, Cuba.
2007
Inaugurada la escultura de Niemeyer “Una Mujer, una Flor, Solidaridad”, en París. La obra quedará instalada en el Parque Bercy, a la salda de la pasarela Simone de Beauvoir, que atraviesa el río Sena y une el parque a la Biblioteca Nacional de Francia.
Inaugurado el Teatro Popular, obra perteneciente al Camino Niemeyer, en Niterói.
Es lanzado el documental “Oscar Niemeyer - La vida es un soplo”, dirigido por Fabiano Maciel

La arquitectura de Oscar Niemeyer en fases

FASE 1
Pampulha: La Cuna de la Arquitectura Moderna Brasileña – 1940 hasta 1943

Lo que podríamos llamar de fase inicial de la arquitectura de Oscar Niemeyer señala también el inicio de la elaboración de una arquitectura nacional con una identidad brasileña. En ese contexto están las obras arquitectónicas del Conjunto de Pampulha (1940-43) que en su diseño articulan elementos de carácter nacional y universal, en los cuales se define “un juego inesperado de rectas y curvas” – según palabras del propio arquitecto. Promueven, así, la confluencia entre racionalismo, organicismo e formalismo libre - que se adueñaban de la crítica internacional en la época de su construcción. La hábil manipulación de elementos formales y principios compositivos funcionalistas en conjuntos sintéticos simplemente superó la dicotomía que se venía estableciendo en el panorama de la arquitectura moderna. Dentro do Conjunto de Pampulha, se destacan la Iglesia de San Francisco de Assis, que tiene fuerte relación con la arquitectura barroca minera (de Minas Gerais) en lo que se refiere a características tales como unidad estructural y sensualidad y extravagancia formal, presentes en un formalismo arquitectónico libre.

FASE 2
Forma Libre y Organicidad – 1943 até 1953

La fase posterior a la construcción Conjunto de Pampulha está marcada por la mantención de la explotación de las posibilidades artísticas y de formalismo libre y orgánico de la arquitectura, aliada al desarrollo de técnicas de ingeniería y cálculo de materiales, entre los cuales el concreto armado. Se acentúan las principales referencias e inclinaciones poéticas del arquitecto: los trabajos del escultor Jean Arp, los paisajes pintados por los artistas del movimiento Surrealista europeo y la sensualidad exuberante de las formas de la naturaleza tropical y de las mujeres brasileñas. Se destacan el Conjunto Ibirapuera (São Paulo, 1951) y la Casa de las Canoas (Rio de Janeiro, 1952-53) – la casa del arquitecto – donde Oscar Niemeyer integró el edificio de su residencia al terreno natural tropical que recibió la construcción.

FASE 3
Brasilia: Modernismo, Magia y Eternidad – 1953 hasta 1965

Esta fase de Oscar Niemeyer está iniciada por la revolución en contra de las ortodoxias de la arquitectura, cuando se hacen evidentes movimientos más definidos de su obra orientados a explorar una realidad paralela, oculta, tal como nuestro subconsciente. En ese sentido, la búsqueda de la permanencia ante la transitoriedad y la adversidad mundanas marca la fase: si en el proyecto de la Casa de las Canoas el arquitecto buscó la eternidad a través de la integración con la naturaleza, en esta etapa de su arquitectura la búsqueda de la eternidad se da a partir de la magia aliada a la sublimación de la realidad, donde la construcción de los edificios del Eje Monumental de la capital brasileña – Brasília – desempeña un papel principal en la creación de un admirable y mágico mundo nuevo. A través de una segura articulación del carácter simbólico de su arquitectura, Niemeyer consiguió que obras relativamente recientes, como el conjunto de edificios del Eje Monumental, se afirmaran entre las principales referencias da la identidad cultural brasileña.

FASE 4
Viviendo los “Anos de plomo” en el Exterior y en Camino hacia una Arquitectura Social – 1965 hasta 1989

Después de la construcción de Brasília, que marcará para siempre su vida y obra, y del Golpe Militar de 1964, que inaugura el período de la dictadura en Brasil, Niemeyer se exilia en Europa donde entra en contacto con la historia y la arquitectura de la antigüedad que marcarán la madurez y perfeccionamiento técnico de su arquitectura. Ilustran ese momento su proyecto para la Mesquita de Argel (Argélia, 1968) y la sede de la Editorial Mondadori (Itália, 1968-75), ambas de 1968. Se destaca también la orientación de su arquitectura cada vez más hacia un objetivo político, social y público, pero sin descuidar su carácter artístico. En esa fase, formalismo libre, organicismo y clasicismo surrealista se funden más intensamente a la preocupación social del comunista Oscar Niemeyer, en proyectos como la Sede del Partido Comunista Francés (Paris, 1965-80), la Universidad de Constantine (Argélia, 1969-77), la Casa de la Cultura (Le Havre, 1972-82) y, después de su regreso al país en los años 80, en los proyectos del Sambódromo (Rio de Janeiro, 1983-84) y de los Centros Integrados de Educación Pública, CIEPs (Rio de Janeiro, más de 500 unidades iniciadas en 1984).

FASE 5
El Museo Personal y los Museos del Hombre – 1989 hasta hoy

En esta fase, Oscar Niemeyer prosigue en el proyecto de espacios culturales públicos y demuestra el dominio pleno de su propio vocabulario, cuando se destacan los museos y memoriales, que señalan su exploración del imaginario del hombre – y el imaginario presente en el carácter icónico de su propia arquitectura – donde autorreferencia, simbolismo y la búsqueda de la conservación y estudio de las evidencias materiales e inmateriales del pueblo brasileño marcan sus edificaciones. La fase se inicia al fin de la década de los 80 con la construcción del Memorial de América Latina en São Paulo, pasando por el Museo de Arte Contemporáneo de Niterói, por el Museo Oscar Niemeyer en Curitiba, por el Museo de Brasília y por el complejo arquitectónico en ejecución titulado de Camino Niemeyer (Niterói), iniciativas orientadas hacia los principales aspectos culturales del pueblo brasileño. En el Camino Niemeyer, actualmente en construcción, y en el proyecto para el Centro Administrativo de Minas Gerais, el arquitecto dialoga con proyectos y obras más notables de su trayectoria, además de arriesgarse a una arquitectura de gran escala, pero que no pierde su calidad, como ya lo había logrado en el proyecto de la Universidad de Constantine.

Oscar Niemeyer
Presentación de Kadu Niemeyer

A mi abuelo siempre le gustó la fotografía. Como todo buen artista él se preocupaba con las reproducciones que irían, verdaderamente, a divulgar su trabajo en los más variados lugares. Nosotros teníamos en casa un pequeño laboratorio, y fue allá, aún niño, que empecé a interesarme por la fotografía.

Con el pasar del tiempo, lo que era sólo una jugarreta de niño se volvió un hobby y, más tarde, mi profesión. Siempre busqué, en todos mis trabajos en las más variadas áreas de la fotografía, respetar el “modelo”, el objeto a ser fotografiado, tratando de respetar su propia verdad, su esencia. Incorporo las características de la técnica fotográfica para mostrar nuevos ángulos, nuevos encuadramientos, puntos de vista particulares que solamente el mirar congelado por la fotografía puede revelar.

La arquitectura de mi abuelo es muy rica, llena de curvas sensuales, de ritmos y balanceos que, muchas veces, acaban por provocar ciertos “sueños” en los fotógrafos, haciendo que decidan emprender un viaje particular, disociándose enteramente de la verdad objetiva. Los ensayos fotográficos, cuando son bien hechos, son una buena experiencia, pero en el caso de la fotografía de arquitectura ellos no siempre son necesarios. El desafío del buen fotógrafo es exactamente el de presentar el elemento arquitectónico, destacando su fuerza y su belleza y, al mismo tiempo, invertir en la elaboración de un lenguaje fotográfico personal, sensible, bien producido. Es eso lo que yo busco en mi trabajo.

Con mi abuelo aprendí que las virtudes fundamentales del ser humano son la honestidad y la modestia. Él siempre dice “(...) la arquitectura no tiene importancia. Importante es la vida”. Si él, famoso como es, afirma siempre eso, imagínese yo, o cualquiera de nosotros. Busco sólo ser fiel al profundo afecto que tengo por él, mi “abuelo”, mi “dindo”, mi “padrazo”. Y busco también colaborar para que su trabajo, para que sus proyectos, puedan, por medio de mis reproducciones fotográficas, continuar despertando el encantamiento y el aplauso de todos. Ese es mi principal objetivo y quedo feliz cuando percibo que mi fotografía cumple su papel.

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